Riquelme fue infiltrado y será exigido en la semana para ver si llega al partido del domingo. Falcioni espera contar con el capitán.

Comenzó la semana en Boca y todos saben cuál es el objetivo más importante de la semana: llegar en las mejores condiciones al encuentro del domingo ante Banfield, en el que el Xeneize puede ser campeón del Apertura.

Pero, por sobre el resto de los jugadores, resalta la recuperación de uno: Juan Román Riquelme. El enganche continúa con la rehabilitación de su fascitis plantar, que lo alejó de las canchas en los últimos partidos. Román quiere jugar ante el “Taladro” y Falcioni espera poder contar con él. Por eso, hoy fue infiltrado y mañana comenzarán a exigirlo para ver cómo responde. Si el resultado es positivo, crecen sus chances de estar. Si no, se complicaría su presencia.

En cuanto al resto del equipo, la idea del entrenador es tener a los mismos once que le ganaron a Godoy Cruz. Con Blandi descartado, Cvitanich seguirá siendo titular. Si Riquelme puede, estará. Otra posibilidad es que juegue en los últimos minutos del encuentro, con el resultado casi puesto. También harían eso con Sebastián Battaglia, quien quiere volver luego de una osteocondritis que no lo deja jugar desde abril.

Con todos estos alicientes, comenzó la semana de Boca. Falcioni quiere el punto que falta para que el Xeneize sea campeón el domingo. Pero también, quiere tener al 10.