El volante terminó con molestias.
El volante “cuidó” al jugador rival. Mirá el video.
Fue un Superclásico donde se metió pero también donde muchos se cuidaron. El motivo era claro: no perderse la revancha.
Es que diez jugadores estaban al filo. Si veían una amarilla, no podían jugar la vuelta. Le pasó a Santos Borré.
Durante el primer tiempo, se dio algo atípico. Casco fue a trabar con Jara y Villa y, enojado por el choque, empujó al colombiano. La respuesta fue un empujón de parte de los dos jugadores de Boca.
Parecía que se armaba un tumulto pero apareció Pablo Pérez. Con la intención de calmarlo, sacó a Casco y le preguntó “¿Vos no tenés amarilla?”, como incitándolo a serenarse.
El dato: el lateral de River no estaba con opciones de quedarse sin la revancha. Y no fue amonestado en esa jugada, pero sí después.
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