Primero, antes de hacer cualquier análisis sobre lo que dejó la goleada ante Newell’s, voy con lo más importante de todo: qué lindos son los lunes cuando gana Boca. La semana ya tiene otro color y los problemas diarios que la vida pone el camino, por más pesados que sean, se hacen más llevaderos.
Ahora sí, metiéndome de lleno en lo que respecta al fútbol, digo que de ninguna manera podemos dejar pasar este momento. El 5-0 contra los rosarinos tiene que ser el real punto de partida para un equipo que necesita, de un vez por todas, pisar firme y convertirse en algo más confiable. Esa será la única manera de ilusionarnos de verdad.
Líderes en nuestra zona y en puestos de Libertadores 2026
Lo que hasta hace algunos días era impensado, hoy ya no. Boca está en lo más alto de la Zona A del Clausura, tiene boleto en mano para ir a los playoffs y encima se metió en puestos de clasificación a la Copa Libertadores del próximo año. El panorama, desde lo numérico, es alentador. Todo depende de nosotros. Por eso, por favor, no la tiremos afuera.
Paredes, nuestro guía
Leandro Paredes llegó y cambió casi todo. Adentro y afuera de la cancha. Líder natural, que se hizo eje en el centro del campo de juego, pero también en el día a día. Cuando había pocos motivos para creer y soñar con algo, apareció para devolvernos la ilusión. Hay un plantel encolumnado detrás de la figura del chico que creció en San Justo, fue campeón del mundo y ahora va por la gloria con el cuadro que lo formó. De ninguna manera se puede desaprovechar su presencia en el club.
Se alinearon los planetas para varios de los nuestros
Milton Giménez volvió al gol y facturó por duplicado. Juan Barinaga demostró que con actitud puede suplir varias cosas. Lautaro Di Lollo y Ayrton Costa siguen jugando con el cuchillo entre los dientes, sin regalar nada. Alan Velasco entendió, por fin, que un volante ofensivo de Boca la tiene que pedir siempre. El techo todavía está lejos, pero es no es poca cosa tener varios aspectos para destacar tras un partido.
Llegamos enteros a uno de esos partidos que te marcan
No es una final, no es un partido mata-mata, pero lo que ocurra el sábado en la cancha de Barracas Central nos va a marcar. Sin dudas, el choque ante el Guapo es uno de esos encuentros en donde la personalidad, el temperamento y la templanza son casi tan importantes como el nivel futbolístico. La ausencia de Paredes, convocado a la Selección Argentina, se va a sentir. Pero si hay grupo tiene que aparecer este sábado, desde las 14 horas, ahí. El deseo es uno solo: que el Xeneize no nos sea indiferente.