Agustín Orion fue el arquero de Boca en el superclásico y PBJ lo analizó. Repasá en esta nota sus intervenciones con video incluido.

Luego de 17 meses, Boca y River se volvieron a cruzar oficialmente. En la tarde de ayer en el estadio Monumental, Agustín Orion sufrió un balde de agua fría. En menos de dos minutos de juego, un tiro libre de Ponzio terminó en la primera conquista para el equipo local.

En esta jugada, el remate del volante “Millonario” picó en frente del arquero y lo descolocó. Más allá del pique, la reacción de Orion no fue buena y fue su responsabilidad.

Esto pudo haber influido en su confianza porque unos minutos más tardes salió sin decisión a despejar un centro con puñetazos débiles  y otra mala salida aérea.

Con el correr de los minutos, el arquero agarró confianza y fue el que todos conocemos. Mostró seguridad en nuevos balones aéreos y no se le notaron complicaciones.

En el complemento, los errores defensivos llevaron a un nuevo gol de River. Esta vez Mora se escapó por la espalda de la última línea, dejó al “uno” desparramado que había intentado cubrir su arco mediante una barrida, pero no pudo con la velocidad del delantero.

Boca había conseguido descontar mediante un penal de Santiago Silva y alrededor de los 35 minutos, Mora quedó mano a mano con el arquero que resolvió de una muy buena manera para impedir el tercer gol del local.

Sobre el final del partido, el conjunto azul y oro consiguió empatar el partido de la mano de Walter Erviti. Agustín Orion fue el responsable en el primer tanto de River pero luego se tomó revancha ante Mora para que no marque el tercer gol y le de vida al equipo de Julio César Falcioni.

En síntesis: Mucha desconfianza en los primeros minutos de juego. Responsable del primer gol. Luego mostró seguridad aérea y una gran respuesta frente a Mora para salvar al equipo.