Boca fue dominador, pero en un partido sin emociones. Empató sin goles ante Tigre, en Victoria. El Xeneize sigue adeudando buen juego.
El partido comenzó disputado en la mitad de la cancha. Boca buscaba por las bandas con Clemente y Fernández. En uno de esos centros, a los 18 minutos, le quedó una pelota clara a “Pol”, pero el volante no calculó bien el pique y su remate se fue muy por arriba del travesaño. Fue la primera jugada de gol del partido.
La respuesta del local fue a los 24, con un remate de Leguizamón que pasó muy cerca del palo derecho de Orion. Luego fue Pérez García quien probó desde media distancia, y el arquero Xeneize respondió muy bien.
Con algunas imprecisiones en el medio campo, el juego se volvió algo agresivo. Hubo pocas situaciones, y así se fue la primera parte.
La tónica fue la misma en el complemento. Recién a los 22 minutos hubo un remate de Lucas Viatri que se fue desviado. El encuentro no tenía acciones de peligro, era chato y sin emociones.
Bianchi hizo sus movimientos en busca de la victoria: Leandro Somoza ingresó en lugar de Erbes y Lautaro Acosta reemplazó a Martínez. Pero el trámite no cambió.
Sobre el final, ambos equipos presionaron con más ganas que juego, en busca del gol. Nada pasó. Fue un empate sin goles que deja en continuación la búsqueda de un mejor funcionamiento para el conjunto de azul y oro.