El punta del Xeneize cuenta cómo viene la preparación, la adaptación del equipo y cuáles son los objetivos de cara a la ansiada Liga Nacional.
Miguel García es uno de los pocos jugadores que extendieron su contrato por otra temporada en Boca Río Uruguay Seguros. Luego del exilio de la mayor parte del plantel que disputó la última Liga Nacional, decidió continuar en el equipo que dirige Marcelo Gigante para afrontar un nuevo desafío con la azul y amarilla.
El cordobés posee por naturaleza y experiencia una positiva ascendencia dentro del grupo, lo que lo transforma -sin que el entrenador aún lo haya decidido- en potencial candidato a llevar la cinta de capitán. A poco más de un mes de comenzada la pretemporada, el jugador cuenta sus sensaciones sobre lo que sucedió el año pasado, el presente del equipo y lo que vendrá de aquí en más, cuando comience la temporada oficial.
– El 5° puesto obtenido en la temporada anterior ¿Te dejó conforme o esperabas algo más?
– Yo creo que todos esperábamos un poco más. Después del comienzo de los playoff que tuvimos, no esperaba para nada quedar afuera ahí. Creo que merecíamos más, trabajamos para eso y no se dio, el deporte tiene esas cosas.
– ¿Qué te llevó a tomar la decisión de renovar con Boca?
– Boca es un club que me gusta y en el que solamente tenés que pensar en jugar, y fundamentalmente se trabaja bien, eso es una gran cosa en nuestro vóley. Tuve ofertas para ir a jugar afuera, pero cuando me llamaron nuevamente, no lo dude.
– A un mes de comenzado el trabajo ¿Qué diferencias encontrás entre este plantel y el anterior?
– Este es un equipo mucho más nuevo, solamente continuamos Maxi Chirivino, Agustín Ramonda y yo del año anterior, y todavía Agustín no se nos unió porque está en la Selección. Me gusta mucho cómo se trabaja, de a poco vamos encontrando el juego y las ganas de todos es algo que me ilusiona mucho. Cuando estemos completos, creo que vamos a dar un salto de calidad. Los asistentes Gonzalo Barreiro y Fernando Seijas, el profe Sergio Parra y el kinesiólogo Aníbal Barbero están haciendo un muy buen trabajo en la puesta a punto hasta que se nos una Marcelo Gigante.
– Se viene una Liga sin tantos nombres como la anterior, pero con planteles más parejos ¿Cómo está Boca respecto al resto?
– Para mí va a ser una Liga muy buena y de alto nivel de vóley. Si bien se han ido nombres importantes, hay equipos que se armaron muy bien y va a ser muy atractiva la competencia. Boca siempre está para dar pelea partido por partido, contra quien sea, después se verá para qué estamos realmente; nosotros siempre vamos a querer ser protagonistas.
– ¿Podrá Boca u otro equipo cortar con la hegemonía de UPCN de los últimos años?
– Es un lindo desafío. UPCN ha venido trabajando bien y es merecedor de todo lo que logró. Siempre se pueden cortar las hegemonías, pero para eso hay que trabajar, y mucho. No va a ser fácil para nadie esta Liga.
– ¿Qué sensación te produce como cordobés, que tú provincia por segundo año no esté representada por ningún equipo y por qué crees que se da esta situación?
– Siempre hablo con compañeros y amigos, y es una lástima que teniendo la cantidad de jugadores cordobeses que tenemos, no haya un equipo. Es difícil conseguir apoyo tanto provincial como privado para afrontar los gastos. Hay gente que trabaja para tener un equipo de Liga en Córdoba, pero no es una tarea fácil. Es raro que una provincia tan grande no tenga ese apoyo.
– Casualidad que en tú equipo disputarás el puesto con dos jugadores de tú provincia (Andrés Ribone y Agustín Ramonda) y no se ve fácil la disputa… ¿Cómo ves la competencia por el puesto entre tres co-provincianos?
– Por suerte en mi puesto hay jugadores muy parejos, eso va a servir para que crezca el nivel de los entrenamientos, y por ende el del equipo. Me gusta que sigan saliendo buenos jugadores y jóvenes de Córdoba.
– Compartís departamento con Pablo Guzmán y en los entrenamientos se te ve muy seguido junto a Sebastián Creus… ¿Qué definición le quedaría mejor a este grupo? ¿”Dios los cría y el vóley los junta” o “Este plantel es una cosa de locos”?
– Este año la mejor definición seria “Para jugar en Boca tenés que estar loco”(risas). Es un muy buen grupo, con gente que tiene buena onda y trabaja muy bien, es mi deseo que logremos grandes cosas.