El profe Santella contó que el Virrey escribió en el pizarrón del vestuario un concepto que les quedó grabado a todos.
El ciclo de Carlos Bianchi en Boca no solo dejó un sinfín de títulos y vueltas olímpicas. También implicó un conjunto de enseñanzas que todos los jugadores que pasaron por el equipo le reconocen al DT.
Julio Santella recordó un momento particular de Carlos al frente del plantel azul y oro. En una charla con el sitio oficial contó cuál fue la palabra que el Virrey le inculcó a sus futbolistas en esa etapa exitosa:
“Carlos tenía esas cosas para provocar respuestas en el jugador. Con lo que él transmitía y la línea que bajaba, todos esa noche llegamos convencidos de que íbamos a poder superar la adversidad. Bianchi tenía un ojo especial que veía lo que otros no ven. Tenía esas cosas… Siempre me acuerdo que, después de un campeonato, volvimos al vestuario y anotó en un pizarrón ‘provagar’. Yo no entendía nada. Él nos explicó que eso quería decir seguir con el camino trazado, no desenfocarse, continuar por esa línea. El festejo esa noche del Morumbí fue interminable, muy fuerte desde lo emocional. Eso también marca que internamente sabíamos que era muy difícil lo que habíamos logrado”.