En una extensa entrevista con el diario “Olé”, Emanuel Insúa hizo un balance de lo que pasó en este semestre en Boca Juniors.
Respecto a la Espondilólisis lumbar que lo marginó varias fechas del campeonato, contó:
“Cuatro años atrás, en Inferiores, había sufrido lo mismo pero en una vértebra más abajo. Ahora, en Primera, tuve que tomarlo con mucho más profesionalismo y hacer todo al pie de la letra, empezando por un reposo con faja de tres semanas, para recuperarme lo más rápido posible”.
“Es un tema de que tengo que mantener fortalecida la zona media, los isquiotibiales y los lumbares, para que no sufran. Haciendo todo eso, el resto de mi carrera tendría que andar perfecto… Mi error fue querer seguir jugando con dolor. Pero como todos, cuando estás jugando, y más de titular, no querés que te saquen… Y sufrí mucho, porque el equipo estaba armándose bien, yo había jugado siempre y casi que me perdí el resto del torneo. De hecho, me habían dicho que no iba a jugar hasta el 2014. Pero a tres semanas de que terminara el torneo, me sentía bien, y pude volver en los últimos dos partidos”.
Sobre la lucha del equipo por el campeonato, expresó:
“Más allá de que fuimos irregulares, la ilusión estaba hasta la penúltima fecha. Justo fue cuando me toca volver a jugar, y contra Lanús volvimos a pecar con errores nuestros en el primer tiempo y, con el empate, fuimos a jugar ante Gimnasia ya sin chances. Tampoco pudimos hacer un buen partido, pero por lo menos no se perdió para alegría de la gente que siempre nos apoyó. Pero rescato la actitud del equipo, siempre tratamos de hacer lo mejor posible, a veces sale, otras no. Ahora hay que replantearse, tener autocrítica y ver cómo se puede mejorar“.
Coincidió con los dichos de Carlos Bianchi:
“Lo que dijo Carlos me parece bien, lo tomo como una crítica de un entrenador y además es cierto, nos faltó esa actitud ganadora de ir a buscar los partidos, de darnos cuenta de la camiseta que estamos representando. En algunos partidos teníamos la chances clara de acercarnos al primer puesto, y faltó esa actitud de ir a buscar los partidos convencidos. O se perdieron partidos claves como All Boys”.
“Todos estamos de acuerdo en que estuvimos en deuda futbolística. En la mayoría de los partidos no jugamos como el técnico pretendía. Pero sabemos que tratamos de dar lo mejor. También las lesiones no permitieron formar una base, eso te perjudica”.
Para cerrar, aseguró que no salieron las cosas que pedía el entrenador:
“Siempre escuchamos al entrenador y tratamos de hacer lo que nos pide. Pero las cosas a veces salen, a veces no. Quizá venís en una racha negativa en la que las cosas no salen, lo querés cambiar pero adentro de la cancha te sentís perdido, y no se te dan las cosas. Igual, mirás alrededor y ves que los otros equipos también están irregulares. Llegó la última fecha y hay cuatro clubes con chances de ser campeón. Pero somos conscientes de que a lo largo del torneo tuvimos errores, sobre todo en defensa, que en un club como Boca se pagan caros y no pueden volver a pasar“.