Alejandro Domínguez habló de las últimas polémicas entre la Confederación y el Xeneize. Esto dijo.
Con las polémicas en los cruces contra River de 2015 y 2018, la relación entre Boca y CONMEBOL se vio afectada. Y Alejandro Domínguez lo sabe. El presidente de la Confederación (asumió en 2016) habló de la tensa conexión con el Xeneize en los últimos años y reconoció que es normal que esto ocurra.
En una charla con el Diario Olé, Domínguez tocó los principales temas entre la CONMEBOL y el conjunto azul y oro. Un repaso de sus declaraciones.
La relación con los dirigentes sudamericanos:
“Conozco la cultura también de los dirigentes que quieren utilizar la opinión pública y la presión para ver si logran torcer, a eso me refería un poco con que es la cultura del pasado; tratar de ejercer presión de cualquier forma a veces para ver si consiguen un resultado . Y eso conmigo no va. Lamentablemente a veces el público se traga estas mentiras, los dirigentes no asumen su responsabilidad y generan ese clima hostil a ver si sacan ventaja. Yo estoy seguro de que la verdad sale a la luz aunque lleva a veces mucho tiempo”.
Las acusaciones de que es hincha de River:
“Mi relación familiar y personal está mucho más cerca de Boca, no me hace de Boca ni de River. Mi padre y Alberto J. Armando eran compadres. Mis padres fueron padrinos de casamiento de Alberto, quien era padrino de mi hermano menor, Emilio. Me une una amistad con muchos dirigentes de Boca. Lo que pasa es que era la final de la historia, y los dirigentes tienen distintas maneras de accionar y pensaron que con esa presión iban a conseguir alguna ventaja”.
El gas pimienta en 2015:
“En la realidad mi política siempre fue y estuve en desacuerdo con la Conmebol que aceptó que un partido en la Bombonera se defina en el escritorio. Mi política es que los partidos se tienen que definir en el campo de juego”.
Los incidentes en el Monumental en 2018:
“Yo no quisiera opinar sobre ese punto porque yo también estaba sujeto a que la Comisión Disciplinaria dictamine. Muchas veces ocurre que dictamine algo que no me parece, pero no puedo opinar. Muchas veces la gente cree que soy yo y me la tengo que bancar; muchas veces creo que se equivocan y también me la banco”.