Una nueva lesión azota contra el gran presente de Boca Juniors. ¿Cómo lo resolverá el entrenador?
En el día de ayer, Boca perdió más que un partido ante Racing. La derrota quedó opacada por la dura lesión de Darío Benedetto, carta de gol y principal figura del equipo, que trae una de las peores noticias del año para Guillermo Barros Schelotto.
Más allá de perder al “9” por tantos meses, el entrenador Xeneize demostró una virtud destacable ante situaciones similares. Recordemos que le costó mucho conformar un once titular que se repita debido a la cantidad de lesiones que se lo impedían. Aún así, pudo salir campeón del torneo anterior.
Desde su llegada, tuvo que afrontar las ausencias de grandes pilares del equipo y siempre supo reinventarse. Primero, la lesión del arquero titular: Guillermo Sara debió ser reemplazado por Werner para jugar en el Monumental. Luego, Rossi se haría el dueño del arco azul y oro.
Después, la salida de Carlos Tevez a quien supo reemplazar con un Centurión problemático pero de buen nivel dentro del campo de juego. Justamente sería Ricardo Centurión quien abandonaría el equipo meses después por mala conducta y así, Boca perdería a uno de sus jugadores claves en ataque.
En abril, Sebastián Pérez sufrió una lesión ligamentaria que todavía no lo dejó volver a jugar con la Primera. Y ante estas duras bajas se le sumaría, quizás, la más importante del año: Fernando Gago y una rotura de ligamentos cruzados durante un partido con la Selección. El Xeneize perdía a su capitán y conductor.
El último en sumarse es el “Pipa”, que ya había sido baja durante los clásicos del año pasado cuando sufrió un desgarro ante San Lorenzo y en su lugar ingresó Bou, quien tiene una nueva chance. Aún así y con una lista bastante extensa, Guillermo siempre encontró la manera de que el equipo siga en pie. Ahora, es momento de demostrar.