Porque recién llega, porque viene de ser campeón con Argentinos, porque todavía falta que se sumen jugadores importantes como Riquelme, porque todavía falta que Battaglia recupere su nivel, porque la defensa necesita rodaje para conocerse, porque no está todo tan mal, porque esto es Boca y se alienta en las buenas y en las malas y porque sería estúpido que un proyecto, que empezó hace 2 meses, ya se termine sin ni siquiera jugar partidos importantes como con River, Estudiantes o San Lorenzo.Por todo esto, Borghi no se puede ir de Boca y es una falta de respeto que se pueda llegar a hablar de esto.
El equipo del Bichi aún no ha tenido suficientes partidos como para que esto se acabe así. Un proyecto es algo que se tiene que hacer en serio y por un tiempo prolongado, mínima mente un campeonato tiene que pasar como para que se defina si este modelo funciona o no en este club. No se puede decir que no hay plantel, ya que todos vimos jugar bien a los que se incorporaron en sus anteriores clubes, el entrenador que llegó viene de ser campeón hace menos de tres meses y con un equipo mucho más chico de lo que es el Xeneize. Entonces ¿qué se debe hacer? Esperar, calmarse, bajar los humos y las exigencias.
Si este equipo no podía dar dos pases seguidos en el torneo anterior ¿por qué de la noche a la mañana lo va a cambiar? ¿Por qué, si el plantel se encontraba dividido entre Riquelmistas y Palermistas, de la noche a la mañana va a cambiar? ¿Por qué, si la dirigencia se encuentra en una lucha despiadada para ver quien gana la presidencia en las próximas elecciones, va a cambiar ahora? El equipo de Carlos Bianchi que logró todo en el 2000 estuvo trabajando durante tres años para lograr esa cantidad de éxitos inolvidables. El Virrey llegó en el 98 y recién dos años después pudo ser campeón del mundo. ¿Y si la pelota no entraba en los primeros partidos, se hubiese ido sin hacer todo lo que luego hizo?
En honor a la justicia, es realmente injusto que el ciclo Borghi finalice de manera tan precoz, más allá de que él haya declarado como lo hizo. Claramente hay una presión desmedida desde el Mundo Boca que no permite que los directores técnicos trabajen tranquilos, por lo que es momento de que esto se calme y se deje a Borghi en paz.