El Uruguay del Maestro Tabárez clasificó a la semifinal gracias a que en el minuto final del 2do tiempo del alargue su delantero estrella puso las manos para evitar un gol de Ghana y dieron un penal que erraría Asamoah Gyan.
Hasta el final del primer tiempo el partido estaba para cualquiera de los dos equipos, con chances para ambos y distracciones entre la linea de volantes y defensores que permitieron varias ocasiones de gol. Recién en el minuto 46 Muntari pudo romper la valla de Muslera y le dio la ventaja al conjunto africano justo antes del entretiempo.
En el segundo tiempo el maestro se decidió por poner un poco más de juego en la cancha y entró Lodeiro por Álvaro Fernández. No pasaron 10 minutos que una falta le permitió a “Cachavacha” Forlán poner el empate y trabar el resto del partido.
Los 90 minutos terminaron con los jugadores muy cansados y casi sin intentos de llegar al área rival. Durante el primer tiempo del alargue no hubo emoción alguna, por lo que toda la presión se llevó a los segundos 15 minutos. Y en el minuto final, un tiro libre de Ghana llevó a una jugada con muchos rebotes que terminó con Luis Suárez metiendo las manos para evitar un gol contra su equipo. Penal para Ghana.
Cuando Suárez se disponía a dejar la cancha, Asamoah Gyan reventó el travesaño con su tiro y le dio a Uruguay la posibilidad de ir a penales. El llanto de Suárez se transformó en un grito de alivio. En los penales, Muslera atajó 2 penales y Ghana atajó 1. El tiro definitivo fue un clásico uruguayo: El “Loco” Abreu picando la pelota hacia la mitad del arco.
Festeja Uruguay, que enfrentará a Holanda por un lugar en la final de la Copa del Mundo. Suárez, Forlán, Abreu, Muslera y el Maestro Tabarez pasan a la historia grande del fútbol charrúa.