Mauro Zárate sorprendió a todos con su confesión sobre su salida de Boca. Y es que el delantero reflejó que el final de su ciclo en el club se dio por una discusión que tuvo con Miguel Ángel Russo, quien era el director técnico del equipo en ese entonces.

Me junto en Boca y me termino yendo de Boca por una discusión con él. Pero bueno, en algún momento lo vamos a hablar porque yo lo aprecio muchísimo y lo quiero mucho. Nos vamos a cruzar y lo vamos a charlar”, manifestó el ya retirado futbolista en una charla con Juan Pablo Varsky en “Clank!”.

¿Qué pasó entre Mauro Zárate y Miguel Ángel Russo?

Zárate explicó que el problema se originó en él mismo cuando entró en una mala racha de lesiones. “Salimos campeones, fue todo bueno, ahí me cuidaba, comía bien, pero me empecé a lesionar. No sabía que era. Ya no sabía qué más hacer para en el tiempito que estuve con él no tener problemas. Volvía, me volvía a lesionar…”, sostuvo.

“Eso me jugó una mala pasada en la cabeza. Tuve una reacción y ahí tuvimos una discusión fea y yo decido irme”, puntualizó Mauro. Y remató contando cómo fue la reacción de Juan Román Riquelme: “Ahí hablé con el Consejo y esperé a hablar con Román, que no lo entendía. Me decían que era una locura lo que quería hacer. Era para seguir un par de años y terminar bien”.

Zárate se fue de Boca por una pelea con Russo. (Getty)

Mauro Zárate sobre lo que implica jugar en Boca

Sobre lo que vivió como futbolista de Boca, Zárate solo tuvo palabras de elogio: “Tiene ese nombre porque es un mundo aparte. No podés salir a la calle, jugaste mal y perdiste un partido, y es quedaste adentro, no prendas la tele“. “Vos sabes lo que hiciste mal, corregilo y volvé a entrenar, y trata de seguir mejorando. Hiciste un gol y la estás rompiendo, no prendas la tele porque sos Maradona. Para los dos lados tenés que mantenerte en un eje. Si haces eso te mantenés bien”, indicó.

Mauro enfatizó en el hecho de que hay que estar muy sereno en cada paso que se da como futbolista de Boca: “Si vas para un lado o el otro, en algún momento te la pegas y lo sufrís. No es fácil”. “En la calle que te hablen o te pidan fotos, se disfruta mucho. Sentís el cariño. Y cuando va mal el hincha de Boca no te lo hace saber. Nosotros perdimos una final y el primer partido, La Bombonera explotada. Nos juntamos a hablar con los hinchas y ‘vamos para adelante muchachos’”, sentenció.