Boca sumó otra mala noticia además de la derrota frente a Newell’s de este último domingo en Rosario. En el complemento, Ander Herrera había ingresado por Milton Delgado pero solamente pudo jugar 5 minutos. En una disputa de balón, hizo un mal movimiento y volvió a lesionarse.
Boca finalmente lanzó el parte médico que indica que el volante tiene una lesión grado 2 en el cuádriceps de su pierna derecha. Es el tercer desgarro que sufre el español desde su llegada a Boca a principios del 2025.
Esto significa que tendrá al menos tres semanas de recuperación, y llegaría con lo justo al Superclásico con River. Sin embargo, su presencia queda en duda debido a que no tendrá rodaje para ese entonces y este último antecedente donde duró poco en cancha no es para nada alentador. Como mínimo, no estará disponible contra Barracas Central, Belgrano y Estudiantes.
Las últimas lesiones musculares de Ander Herrera
Antes de sumarse a Boca en enero, Ander Herrera vestía los colores del Athletic Club de Bilbao. Allí estaba por detrás en la consideración y había tenido pocos minutos desde el inicio de la temporada a mediados del 2024.
En diciembre sufrió una lesión muscular en el bíceps femoral de su pierna derecha y se perdió cuatro encuentros en el conjunto del País Vasco. En los últimos años se perdió un total de 40 partidos por culpa de las lesiones que tuvo.
Ya en Boca, debutó contra Argentino de Monte Maíz y también jugó contra Argentinos Juniors en La Bombonera. Ahí se desgarró el isquiotibial derecho y quedó afuera de las canchas por gran parte de febrero.
Regresó contra Aldosivi como titular, jugando solamente un tiempo. Al partido siguiente, contra Central Córdoba en Santiago del Estero, fue reemplazado por una molestia muscular. Esto hizo que no pudiera jugar contra Defensa y Justicia durante la fecha siguiente y trabajó en su recuperación en la fecha FIFA.
Sin embargo, su regreso a las canchas solamente duró 5 minutos. El español entró por Milton Delgado y un mal movimiento en una disputa de pelota lo afuera del encuentro. Fue tal la bronca que sintió que directamente encaró para el banco de suplentes, dejando al equipo con 10 hombres.