Guillermo Barros Schelotto jugó una década entera en Boca y luego volvió para ser entrenador y salió campeón de nuevo. Su nivel en la delantera era altísimo y supo ser titular con la mayoría de los cuerpos técnicos que pasaron. Y cuando no le tocaba, llegó a jugar en Reserva con tal de no perder rodaje y aún siendo campeón de América y del mundo con el club.
En todo ese tiempo tuvo al lado a muchísimos jugadores que también quedaron en la historia, pero con uno de ellos llegó a cultivar una amistad. “Con Antonio (Barijho), tenía una relación bárbara“, reveló Guillermo en diálogo con TyC Sports durante una entrevista en 2006.
“Una gran persona, teníamos muy buena relación“, agregó el Mellizo sobre el Chipi. Fue su acompañante en la delantera durante la lesión de Martín Palermo entre 1999 y 2000 y luego después de su salida.
La historia de Guillermo Barros Schelotto en Boca
Guillermo Barros Schelotto llegó a Boca en 1997 mientras el Bambino Veira era el entrenador. Venía de brillar con la camiseta de Gimnasia y Esgrima La Plata y se volvió atractivo para el Xeneize, que decidió ir a buscarlo.
Si bien debutó en ese año y tuvo continuidad, fue con Carlos Bianchi que logró convertirse en figura y compartir una dupla letal de ataque con Martín Palermo. Fue protagonista en todos los títulos nacionales e internacionales que obtuvo en el club.
Fue convirtiéndose en referente y es muy querido por los hinchas. Jugó 10 años en los que sumó 300 partidos, 86 goles y 16 títulos. En 2016 volvió como entrenador y fue bicampeón del fútbol argentino.
¿El Chipi Barijho tenía chófer? La aclaración de Guillermo Barros Schelotto
Durante mucho tiempo se contó una anécdota sobre Antonio Barijho: se dijo siempre que no sabía manejar y que a pesar de tener su propio auto nunca venía él al volante. “Tenía remisero pero es mentira que no sabía manejar. Creo que lo tenía al primo ahí para salir“, reveló Guillermo Barros Schelotto en diálogo con TyC Sports en 2005.