Boca está a punto de cerrar la llegada de Ignacio Miramón como sexto refuerzo. Y, pese a esto, el Xeneize todavía no se baja del mercado de pases con el objetivo de competir en todos los frentes.
Este lunes, Marcelo Gallardo fue presentado como nuevo entrenador de River tras ser echado de su anterior cargo en Arabia. Y Juan Román Riquelme, no está exento de esto y buscará responder con un refuerzo de jerarquía: Carlos Palacios.
Mercado de pases 2024: Boca irá nuevamente a la carga por Carlos Palacios
La información fue revelada por TyC Sports, fuente que remarcó que Boca no se retira del mercado y que irá a la carga una vez más por Carlos Palacios. Y que ahora el club de la Ribera estaría dispuesto a poner los 4.5 millones de dólares de su cláusula de rescisión.
A su vez, agregaron que el Xeneize intentará primero negociar por el delantero de Colo Colo por un monto menor. Cabe recordar que, a principio de año, el extremo fue buscado por Boca, pero en ese momento la transferencia no se terminó concretando.
¿Por qué Carlos Palacios no llegó a Boca a principios del 2024?
Boca busca a Carlos Palacios desde comienzos del 2024. Y en aquel entonces el Xeneize ofertó una cifra cercana a los 4 millones de dólares por el delantero. Sin embargo, en Chile la rechazaron y el jugador se quedó a disputar la Copa Libertadores 2024.
Ahora, con las millonarias ventas de Boca en este mercado de pases, la historia parece ser diferente. Y según la fuente citada, el Xeneize estaría dispuesto a hacer un esfuerzo económico por el delantero. El cuadro chileno tiene el 40% del pase del extremo mientras que el resto pertenece al Vasco Da Gama de Brasil.
¿Qué dijo Carlos Palacios sobre su posible llegada a Boca?
Carlos Palacios habló varias veces sobre su posible llegada a Boca. Y lo último que declaró fue: “Conversé con Román, como siempre. Desde enero que llevo una relación muy bonita con él…“.
Y agregó: “Me ha tratado súper bien… Feliz de que el último 10 me llame, me ayude. Soy muy joven todavía, me ha aconsejado y hemos hablado de fútbol siempre. No sé qué me ve, porque por ahí dicen que no saben qué me ve… Así que, nada, le mando un abrazo y que le pregunten qué me ve, para que él responda, porque por acá dicen que no saben qué me encuentra”.