Claudio Úbeda presentó la lista de concentrados de Boca para el duelo con Tigre y hubo dos futbolistas que volvieron a estar ausentes. Se trata de Frank Fabra e Ignacio Miramón, jugadores que no son tenidos en cuenta por el cuerpo técnico y quedó demostrado una vez más.
Y es que de cara al enfrentamiento del día domingo, tanto Fabra como Miramón no estarán entre los suplentes. Sin embargo, esta decisión de Úbeda no es para nada sorpresiva debido a que sus nombres aparecen rara vez entre los citados desde que comenzó el segundo semestre. El volante sí fue concentrado contra Estudiantes, pero fue únicamente por la baja de Leandro Paredes.
Contra River, otra vez desapareció de la lista y el panorama se mantiene ante el ‘Matador’ de Victoria. Por su parte, el lateral hace más de dos meses que no recibe el llamado del DT y llegó al quinto encuentro consecutivo sin ser convocado. No hay dudas de que ninguno de los dos está en los planes y se marcharán en diciembre.
Ignacio Miramón se irá de Boca a finales del 2025
Es un hecho que el ciclo de Miramón está por llegar a su fin. A mediados del 2024, el club llegó a un acuerdo con el Lille para que desembarque al club por un préstamo de un año y medio. Justamente, la cesión vence a principios del mes de diciembre y no lo retendrán, teniendo en cuenta la gran cantidad de jugadores que hay en su puesto.
Además, había un detalle en su contrato y era la inclusión de una opción de compra. Esta última pasaba a ser obligatoria si firmaba el 70% de las planillas, pero no tenían pensado ejecutarla y es por eso que dejó de ser convocado en el segundo semestre.
Fabra se irá libre de Boca en diciembre
El contrato de Frank Fabra en Boca vence el 31 de diciembre y no será renovado. Hasta el momento, desde el club no iniciaron gestiones para prolongar su estadía y todo parece indicar que se marchará después de estar casi 10 años en el Xeneize.
El ciclo del colombiano comenzó a cambiar por su relación con la hinchada. Su expulsión en la final de la Copa Libertadores 2023 hizo que se quebrara el vínculo con los fanáticos y, desde ese momento, fue silbado cada vez que estuvo en cancha. Por otro lado, varios DT’s lo imaginaban en su equipo titular, pero su rendimiento no fue bueno y terminó quedando relegado, como ocurre en el presente.