Boca y Cruzeiro volverán a estar otra vez cara a cara por un torneo internacional. Esta vez será por los octavos de final de la Copa Sudamericana, certamen por el cual todavía nunca se enfrentaron a lo largo de la historia.
En La Bombonera y en el Mineirao se escribirán nuevas páginas de un historial que cuenta con capítulos memorables, desde una final histórica en Montevideo, pasando por la vez en que Ronaldo Nazario fue figura, hasta la polémica con el VAR del último cruce.
La atajada histórica de Gatti en Montevideo que le dio la primera Libertadores a Boca
El 14 de septiembre de 1977, en el Estadio Centenario de Montevideo, Boca obtuvo la primera de las seis Copas Libertadores que guarda en su vitrina. El rival de turno fue Cruzeiro de Brasil y la serie debió definirse en un tercer partido, luego de dos empates: primero en Buenos Aires, después en Belo Horizonte.
En el desquite, Hugo Gatti, ídolo del Xeneize, se hizo gigante bajo los tres palos y fue el héroe en la definición por penales. El “Loco” le contuvo el disparo a Vanderley y el Único Grande se impuso 5-4 en la definición.
El día que Ronaldo fue verdugo de Boca jugando para Cruzeiro
En la Copa Libertadores 1996, Boca compartió la zona de grupos con Cruzeiro. En el último partido, que terminó de eliminar al Xeneize del certamen que ganaría cuatro años más tarde por tercera vez en su historia, visitó Belo Horizonte y cayó derrotado por 2 a 1.
Un joven Ronaldo Nazario, quien tiempo después se consagraría como campeón del mundo con Brasil, marcó el segundo tanto y fue una de las grandes figuras del partido.
El último cruce entre Boca y Cruzeiro: el VAR, protagonista en la ida
Cuartos de final de la Copa Libertadores 2018. Boca fue local de Cruzeiro, le ganó 2-0, pero sufrió la lesión de Esteban Andrada. El arquero titular elegido por Guillermo Barros Schelotto, el entonces entrenador del Xeneize, sufrió la fractura de su mandíbula tras un durísimo choque con el defensor Dedé.
El futbolista de Cruzeiro fue expulsado después de que el juez principal vea la jugada en el VAR, pero CONMEBOL anuló la suspensión y pudo disputar la revancha. Sin embargo, en el Mineirao recibió dos tarjetas amarillas y también debió marcharse a las duchas, siendo así el primer futbolista en ser echado tanto en la ida como en la vuelta.