En el Pacaembú, el Xeneize igualó 1 a 1 ante Corinthians y accedió a los cuartos de final del certamen. El próximo rival será Newell’s Old Boys.
Desde el comienzo, Boca intentó mover la pelota con criterio, manejando los tiempos. A la hora de la recuperación, presionó en todos los sectores del campo, sin dejar pensar a los rivales.
La primera aproximación de los locales fue a través de Danilo, quien probó desde media distancia pero su remate salió desviado. A los 23, Romarinho pudo vulnerar a Agustín Orion, pero el juez de línea invalidó erróneamente la acción por fuera de juego.
Dos minutos más tarde, llegó el primer gol del partido. Juan Román Riquelme jugó rápido un tiro libre con Cristian Erbes y al recibir la devolución sacó un fortísimo remate que terminó adentro del arco de Cassio. El arquero quedó sorprendido por la potencia y precisión del disparo del enganche y no tuvo nada que hacer.
Envalentonado tras la conquista, el Xeneize tuvo una segunda chance para convertir. Juan Sánchez Miño comandó un buen contraataque junto con Riquelme, que terminó en los pies de Nicolás Blandi. El delantero buscó el arco, pero chocó con la figura del uno.
En el inicio del complemento, Danilo volvió a avisar, pero Orion tapó la pelota con su pierna izquierda. Era un aviso, que terminaría de concretarse minutos después: centro de Emerson y gol de Paulinho, de cabeza. En los minutos siguientes, el arquero fue clave para evitar la segunda caída de su valla, que hubiese sido un duro golpe para el equipo.
Si bien ya no atacaba con tanta frecuencia, Boca dispuso de dos ocasiones para ponerse nuevamente en ventaja, en los pies de Blandi: la primera la contuvo Cassio en dos tiempos; la segunda se fue por encima del travesaño.
A los 22 minutos, Carlos Bianchi decidió el ingreso de Lucas Viatri en lugar de un extenuado Riquelme. Más tarde ingresarían también Federico Bravo y Nahuel Zárate por Erbes y Blandi, respectivamente.
A falta de un cuarto de hora para el cierre del encuentro, Alexandre Pato dispuso de una inmejorable situación para convertir. La dominó de derecha, pero le pifió con la izquierda cuando quiso rematar. Ahí se terminó el partido.
Boca aprovechó la ventaja de la ida y jugó el partido que más le convino. Fruto del desgaste realizado en la etapa inicial, sufrió más de la cuenta en la segunda, pero encontró la tranquilidad en la soberbia actuación de Orion. De esta forma, dejó en el camino al último campeón de América y del Mundo.
En cuartos de final espera Newell’s Old Boys, que viene de derrotar a Vélez. El primer partido se jugará el próximo jueves en La Bombonera. Será una nueva parada para la mística copera del Xeneize, que va por más.