En un partido complicado, Boca venció a Cerro Porteño por 3-1 en La Bombonera. El rival en la próxima instancia será Nacional de Uruguay. El sueño de la Copa sigue en marcha.
Una primera parte rara. El Xeneize empezó muy bien: a los 3 minutos derribaron a Carrizo en el área y Tevez cambió el penal por gol. Parecía que la serie comenzaba a cerrarse.
Sin embargo, Boca se complicó solo y le cedió terreno a Cerro. A los 11 minutos, Rodrigo Rojas puso el empate. El visitante no se conformó y fue por más, quedando muy cerca del segundo gol.
Orion protagonizó una jugada insólita: salió mal y perdió la pelota. Luego, se desplomó en el suelo y liberó la zona. De milagro no convirtió el rival. Tras el hecho, siguió jugando con normalidad.
En la segunda parte, el equipo continuó mostrando vicios que tuvo en el primer tiempo. El mediocampo no tenía presencia y los laterales no marcaban.
A pesar de eso, hubo dos llegadas. Erbes y Tevez tuvieron la oportunidad pero sus remates se fueron por un costado. Ambas aproximaciones se dieron de contragolpe: Cerro era el que tomaba la iniciativa.
El partido y la serie se cerraron en el minuto 27. Jara robó una pelota y Carlitos frotó la lámpara: lo dejó solo a Pavón para que convierta el segundo y le de tranquilidad a una Bombonera que, otra vez, vivió una noche de Copa con todos los condimentos.
El cierre estuvo a cargo de Pablo Pérez. El mediocampista definió una linda jugada colectiva para el decorativo tercer gol, que abultó el resultado a 3-1 y dejó la serie en 5-2.
Boca está en cuartos de final de la Libertadores y el rival será Nacional. La ida se llevará a cabo en Uruguay y la vuelta en La Boca. El sueño, la obsesión, sigue en marcha.